viernes, 6 de noviembre de 2015

Galicia (IV): tardes de playa fluvial (Primera Parte)

Miau bich@s!!!

Vuelvo a mis aventuras galleguiñas (y todavía quedan unas cuentas). 

Como ya sabréis los que halláis estado en Galicia, suele hacer mal tiempo, pero como estuvimos en época veraniega de vez en cuando milagrosamente hacía un sol estupendo, entonces apetecía salir de Lugo y a mi papi le gusta darse un bañito de vez en cuando.

Así que algunos domingos soleados (si mi papi no se levantaba con mucha resaca) nos íbamos de merienda a la playa fluvial de O Corgo, que es un concello al sur de Lugo. 

Esta playa se encuentra en el río Chamoso justo al lado de la autovía A-6 a Madrid, para llegar es fácil saliendo de Lugo por la Nacional VI hasta pasar la parroquia o aldea de Chamoso y a la izquierda encontraremos indicada una pequeña carretera hasta el lugar (no es difícil, sólo ir atentos como yo, también tenéis enlace al final de esta entrada).

En esta playa mientras mi papi se daba un baño yo me iba a a investigar por ahí, ya sabéis que el agua no me gusta nada, pero hay mucho bich@s voladores que mola perseguir. El lugar es muy chulo y está bastante bien cuidado, además como suele pasar en Galicia todo esta muy verde. Y ya no os digo dormir una siestecita al aire libre.

El paraje cuenta con un bar-restaurante, pero está discretamente apartado de la zona principal que consta de una playa fluvial con arena en un pequeño enbalsamiento del río Chamoso y una zona con mesas de piedra donde se puede comer, también hay una zona infantil con columpios, toboganes y esas cosas que me molan. Vamos, ideal para pasar la tarde, pero para que no tengáis que imaginar os dejo unas fotos.






Os da envidia, no? Jejeje. Ahora para daros más envidia algunas fotos donde os muestro a que me dedicaba suelta por la playa fluvial, no hay nada como el aire libre.

Siempre hay sitios altos para subirse
Pero siempre al acecho de los bich@s voladores
Había muchos bich@s en el agua del riachuelo, pero el agua...
Una siestecita sobre la hierba mientras mi papi se seca al sol
Ya va siendo hora de comer, no?
Bueno, para no cansaros mucho, reservo para una segunda parte una selección de fotos de mis posados en O Corgo, os van a encantar, pero será para la próxima.

Chao y hasta pronto.

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